“Nuevo paso en la comprensión de la biología molecular de este síndrome”
La práctica clínica determina que una de las principales características de los síndromes mielodisplásicos (SMD) es el bajo recuento de células sanguíneas. En ocasiones se detecta con un simple análisis de sangre, pero en otros casos la escasez de uno o más tipos de células sanguíneas son el primer síntoma de este síndrome, de difícil diagnóstico. La Ciencia ha logrado avances en comprender cómo ciertos cambios en el ácido desoxirribonucléico (ADN) de las células de la médula ósea pueden dar paso a que se origine este síndrome, que se define como un grupo de cánceres que se caracterizan por células sanguíneas disfuncionales. Ahora, un equipo de investigadores y clínicos estadounidenses de la Universidad de Washington en St. Louis aseguran en “The New England Journal of Medicine” que un análisis basado en ADN de células sanguíneas poco después de un trasplante de células madre puede predecir la probabilidad de recurrencia de la enfermedad en paciente con SMD.Se trata de un nuevo paso en la comprensión de la biología molecular de este síndrome cuyas causas son desconocidas aún. Por el contrario, se sabe que el cáncer puede ser causado por mutaciones génicas que activan a los oncogenes o desactivan a los genes supresores de tumores. Así los clínicos coinciden en explicar que antes de que una persona desarrolle un síndrome mielodisplásico son necesarias mutaciones en varios genes diferentes dentro de las células de la médula ósea. Aunque también recuerdan que los cambios génicos dentro de las células se pueden acumular durante la vida de una persona. Esto explicaría porqué estos síndromes afectan a personas de edad avanzada. Para identificar en este estudio las huellas dactilares del cáncer, los investigadores consiguieron detectar mutaciones en más de veinte mil genes y luego redujeron su análisis a cuarenta genes. Con ello se descubrieron a pacientes de alto riesgo y demostraron que una prueba similar puede ser muy útil en la práctica clínica.
José María Fernández-Rúa
PUBLICADO EN A TU SALUD(LA RAZÓN ) EL DOMINGO 23 SEPT 2018