La investigación y el desarrollo español de una vacuna contra el SARS-CoV-2 haría posible su uso casi inmediato en la población. “Cuando las vacunas se desarrollan en otros países, tardan, al menos, dos años en llegar. Aunque lo que se consiguiera en el extranjero fuera mejor, es importante contar con una opción nacional para su uso inmediato”. Así lo ha explicado Margarita del Val, investigadora científica del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), durante la tercera Aula Virtual del Centro de Estudios de Políticas Públicas y Gobierno de la Universidad de Alcalá (CEPPyG),
Durante esta jornada, a la que han asistido más de 40 parlamentarios del Congreso, Senado y varios Parlamentos Autonómicos, se ha profundizado en el desarrollo y perspectivas de nuevos tratamientos y vacunas frente a SARS-CoV-2.
Tal y como afirma Del Val, coordinadora de la Plataforma de Salud Global del CSIC, puesta en marcha para abordar los retos que plantea el nuevo coronavirus,“El CSIC es una de las instituciones investigadoras que más se ha coordinado internamente para enfrentar la COVID-19”.
En este sentido, señala que el CSIC ha recibido por parte del Gobierno cuatro millones de euros, para el desarrollo de vacunas, en el Centro Nacional de Biotecnología, y el Instituto de Salud Carlos III ha recibido 26 millones de euros, para la puesta en marcha de nuevos proyectos COVID-19, con una vertiente más clínica. Además, añade que el CSIC ha obtenido más de siete millones de euros de donaciones privadas, principalmente de Mapfre y AENA.
Para hallar un tratamiento o vacuna eficaz, Del Val ha incidido en la “importancia de entender si existe un componente genético que provoca una mayor gravedad de este coronavirus en algunas personas jóvenes”. Asimismo, destaca que es clave evaluar el porcentaje de la población que ha desarrollado ya inmunidad, para decidir cómo y cuándo retomar la normalidad.
Por su parte, Cristina Rabadán-Diehl, directora asociada de Ensayos Clínicos en Westat y ex directora de la Oficina de las Americas del US Department of Health and Human Services, ha realizado un resumen de la situación general en la que se encuentra España y los retos de futuro que se presentan.
“En España, hay 22 ensayos clínicos, 6 más que hace dos días, para encontrar un tratamiento contra la COVID-19. La vacuna tardará más tiempo, ya que, para evaluar la generación de inmunidad es importante hacer primero estudios en modelos animales, y luego ensayos clínicos de seguridad y eficacia. No existe suficiente evidencia científica todavía”, afirma.
Por otro lado, explica que, la mayoría de las iniciativas privadas para la investigación de una vacuna —el 72% del total— provienen de empresas pequeñas, sin experiencia en fabricar a gran escala, “por lo que la colaboración entre distintos agentes del sector va a ser clave para que la vacuna sea una realidad”.
EEUU vs España
En relación a la evolución que está siguiendo la pandemia en Estados Unidos frente a España, y las diferencias entre ambos países en el abordaje de esta crisis, Rabadán-Diehl ha explicado que el presidente del Gobierno Federal, a diferencia del español, no tiene la autoridad de imponer el confinamiento en todo el territorio, ya que la decisión depende de cada Estado.
Asimismo, ha destacado que en Estados Unidos se da la peculiaridad de que un 9.1% de la población no tiene acceso a cobertura sanitaria de ningún tipo. “A esto hay que unirle las comorbilidades propias de la población americana general
—obesidad y diabetes— que hacen que el impacto del nuevo coronavirus en la población joven y de mediana edad sea mucho más alta que en España”.
Por otro lado, ha señalado que la FDA está actuando de una forma muy similar a la AEMPS. “Ha creado un programa de aceleración para el desarrollo de medicamentos dirigidos a tratar la COVID-19. A pesar de que entraña riesgos, esto consigue acortar mucho los plazos. En algunos casos, se están haciendo en paralelo los estudios de eficacia y seguridad con la fabricación de los medicamentos a larga escala”, concluye.