Un grupo de físicos de Rusia, Suecia y Estados Unidos ha demostrado un efecto óptico muy inusual: lograron absorber «virtualmente» la luz utilizando un material que carece de esa propiedad. Este avance ha sido comunicado a la comunidad científica a través de “Optics”. Los autores subrayan que han abierto una nueva vía para la creación de elementos de memoria para la luz. La absorción de radiación electromagnética (luz, entre otras cosas) es uno de los principales efectos del electromagnetismo. Este proceso tiene lugar cuando la energía electromagnética se convierte en calor o en otro tipo de energía dentro de un material absorbente (por ejemplo, durante la excitación de electrones).
El Vantablack lo vemos negro porque absorbe la energía de la luz que incide en él casi por completo. Como se sabe, el Vantablack es una sustancia hecha a partir de nanotubos de carbono. Actualmente es la más oscura que existe y llega a absorber hasta un 99,9 por ciento de la radiación de luz visible Sin embargo, otros materiales como el vidrio o el cuarzo no tienen propiedades absorbentes y, por tanto, los vemos trasparentes. Este equipo multinacional de físicos consiguieron que un material completamente trasparente pareciera absorbente. Para ello utilizaron las propiedades matemáticas de la matriz de dispersión. Se trata de una función que relaciona un campo electromagnético incidente con el dispersado por el sistema.
Los resultados de este trabajo no solo amplían la comprensión general de cómo se comporta la luz cuando interactúa con materiales transparentes comunes, sino que también tienen una amplia gama de aplicaciones prácticas. Posiblemente el más gráfico es que la acumulación de luz en un material transparente puede ayudar a diseñar dispositivos de memoria óptica que almacenarían información óptica sin pérdidas y la liberarían cuando sea necesario.
José María Fernández-Rúa