La Fundación Cotec ha presentado su informe anual sobre la situación de la I+D+i en España y ha apuntado la necesidad de aumentar la inversión en proyectos innovadores, como vía para que la sociedad española pueda liderar los retos de las décadas futuras. Los problemas que recoge el informe se repiten año tras año y parece que las soluciones propuestas no están teniendo los resultados esperados.
El informe ofrece datos sobre múltiples indicadores de la innovación española. Destaca que mientras el conjunto de la UE invierte hoy un 25% más en I+D que antes del inicio de la crisis económica, nuestra economía invierte un 10% menos, constituyendo una excepción en Europa al no haber recuperado los niveles de inversión de 2008. Según los datos, las causas determinantes son la reducción de las cantidades consignadas en los presupuestos y unos decrecientes niveles de ejecución presupuestaria, que en 2016 han llegado a su nivel mínimo histórico en nuestro país.
El fomento de la innovación compete a múltiples actores, tanto privados como públicos. Respecto a los primeros se señala que en 2015, las compañías españolas ejecutaron el 52,5 % del gasto total en I+D, siendo uno de los menores porcentajes de participación empresarial en Europa, cuyo promedio en 2015 era del 63,3 %. Además, casi la mitad del gasto empresarial español en I+D fue ejecutado por pymes, mientras que en países como Francia, Italia o el Reino Unido solo ejecutaron alrededor del 20 %, y en Alemania, menos del 10 %.
El documento señala otros factores como el sistema educativo, el papel de la Unión Europea o el esquema de incentivos fiscales a la I+D+i; factores que deberán ser abordados en el marco de una alianza entre el sector público, empresas y sociedad civil en su conjunto.