“En 2012 el Ministerio de Sanidad contempló la posibilidad de desfinanciar la innovación”
Los políticos siguen sin encontrar fórmulas eficaces para que el Sistema Nacional de Salud siga siendo sostenible ahora y en un futuro próximo, sobretodo porque actualmente hay un total de 547 ensayos clínicos aprobados por las autoridades sanitarias españolas que están testando la bondad de, al menos, medio centenar de medicamentos innovadores para combatir distintas enfermedades. Muchos de estos fármacos están destinados a la oncología donde, en estos momentos, el 23 por ciento de la factura hospitalaria total se dedica a financiarlos.
La Cámara de Comercio Americana en España (Amcham) organizó un encuentro entre representantes de la Administración, de la Academia, la industria innovadora, Sociedades científicas y del Parlamento, para testar la innovación en un sistema sanitario eficaz y sostenible. Jordi Martí, presidente de Celgene, fue el organizador de esta jornada en la que participaron altos cargos de Pfizer, Abbott y Lilly.
En este foro se conoció que, en 2012, el Ministerio de Sanidad que entonces dirigía Ana Mato contempló la posibilidad de abandonar la financiación de la innovación (léase fármacos nuevos innovadores), por el alto coste de la factura farmacéutica. Lo tremendo, en opinión de algunos presidentes de Sociedades científicas, no es que se llegara a estudiar esta posibilidad, sino el hecho de que a la hora de hacer recortes presupuestarios se hagan sin una planificación y estrategia. En aquella ocasión Humberto Arnés, director general de Farmaindustria, se batió el cobre como vulgarmente se dice, y evitó que se llevara a cabo esa medida.
Dos datos para recordar lo que significa la innovación para un país, como el nuestro. La industria farmacéuticas está considerada un sector estratégico, por las inversiones que hace en I+D. Y esto a pesar de que, para medicamentos innovadores, solo hay entre ocho y doce años para recuperar una inversión que, en la mayoría de los casos, supone más de dos mil millones de euros y entre diez y quince años de investigación. Posiblemente la solución a la sostenibilidad del SNS sea, como apostillo el senador José Martínez Olmos, la transparencia de todos los sectores implicados, incluida la Administración.
PUBLICADO EN A TU SALUD EL DOMINGO 12 NOV 2017
José María Fernández-Rúa